Autoridades de la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP), a cargo de Ricardo Echegaray, se reunieron junto a la Fundación ProTejer con el obejtivo de extremar las medidas de control sobre las importaciones de la industria textil argentina.
La reunión de trabajo entre la entidad tributaria conducida por Echegaray y autoridades de ProTejer tuvo como objetivo preservar el nivel de empleo y la actividad productiva de la industria textil nacional ya que tanto en el gobierno nacional como en el sector de la producción inquieta la competencia desleal por su impacto sobre el empleo y la recaudación.
Según un informe de AFIP, el trabajo en conjunto con la entidad industrial permitió la detección de más de 80 despachos de importación de mercadería textil que ingresaron por 20 sociedades jurídicas sin antecedentes comerciales bajo la modalidad de amparo judicial.
Según funcionarios del organismo que conduce Ricardo Echegaray, estas maniobras generaron "daño en el entramado productivo puesto que los productos ingresados son sustitutivos de la oferta textil nacional. Dichas empresas importaron durante 2014 por un valor superior a 67 millones de dólares, equivalente a 13 mil toneladas".
La verificación en el ingreso de productos textiles del exterior se considera imprescindible cuando se examina la composición de la totalidad de los productos que se importan al país.
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